Pueden pasar muchas cosas. Pero lo que es innegable es que
pase lo que pase va a ser histórico. Todavía no se puede adelantar que Pedro
Sanchez va a ser presidente del gobierno de España, puesto que cabe la posibilidad
que en un órdago político de última hora, Mariano Rajoy presente su dimisión,
cambiando el contexto de lo que ahora parece lógico.
Los que entienden de esto dicen que no es imposible, pero si harto difícil después
de la situación que se ha creado, ya que ante un hipotético cambio de
presidente de gobierno y ante la moción de censura, el PP quedaría en clara minoría
para gobernar, ya que se le retirarían todos los apoyos. Esto no es casualidad,
y tampoco yo soy analista político, así es que calificare esta crónica de hoy,
desde la total incultura, y desconocimiento de los entresijos reales de la política,
no así desde el punto de vista del ciudadano de a pie, con pleno derecho a voto,
y con absoluta libertad de expresar mis opiniones.
No puedo negar que esta situación, cuanto menos me inquieta, pero de los que
estoy seguro es que mañana si Mariano Rajoy es apartado del gobierno, me sentiré
contento. Me sentiré contento porque no veo a pesar de lo que me quieren contar
de economías y altas finanzas, que España esté mejor de lo que estaba hace unos
años. Tampoco diré cuantos, por qué no me quiero posicionar políticamente, pues
si lo hiciera seria engañarme a mí mismo. Es como el caso de un amigo, que contaba
hace unos días que el siendo socialista de siempre, llego a votar a José María
Aznar, con el único propósito de “echar” en su día a Felipe González del
gobierno, ya que la situación se había vuelto irrespirable, y era necesario abrir
ventanas y airear la política Española. Eran los tiempos de Roldan y los fondos
reservados seguro que lo recordáis. No es la misma situación la de ahora, pero sí
que es cierto, que gente con poder, con mando en comunidades autónomas, han
llegado hasta el saqueo de las mismas con el objetivo de comisiones y
enriquecerse personalmente. Además el actual gobierno. O mejor el presidente
del gobierno, nos ha mostrado un inmovilismo total y absoluto en algunas cosas
que continúan paradas. En otras desafortunadamente, no tanto, aprobando leyes
que permite meter a alguien en la cárcel, con unas canciones que se llevan
cantando la “friolera” de cuarenta años. No es de razón. Ha permitido subidas
de la “luz” de un 100% los últimos años sino mas, dejando las subidas de las
pensiones en un ínfimo aumento del 0,25%, con lo que el poder adquisitivo de
los pensionistas ha caído en picado. Además
con el agravante de esquilmar la llamada “hucha de las pensiones” que dicho sea
de paso, su mismo partido creo, en un gobierno anterior. Podría seguir opinando
y como dice la propia palabra, solo seria una opinión. Mi opinión. Mejor, o
peor, con razón, o sin ella. Espero que no me traiga consecuencias y que
algunos amigos me vuelvan la espalda por ello. En las reuniones a las que suelo
acudir, siempre digo que no se debe hablar ni de política, ni de religión, ni
de futbol, y es porque la amistad a mi modo de ver, está por encima de todo
esto.
Creo que el país necesita coger el pulso, el ritmo de vida que le corresponde tener, después de más de cuarenta años de democracia. Creo que ahora es un buen momento de afrontar una transición, de la transición que nunca tuvimos en realidad, Es un momento donde por fin veo partidos políticos juntos. Unidos de alguna manera, cosa que me recuerda a finales de los 70, cuando Manuel Fraga, y Santiago Carrillo se sentaban juntos con el único propósito de encontrar un equilibrio en un país que estaba harto. Harto como ahora. ¿En qué momento perdimos lo poco que conseguimos aquellos años?
No se que va pasar, en política 24 horas es todo un mundo, pero bueno, es dar un
primer paso en un país donde todo ya empezaba a ser insostenible. Mucha tarea
tienen por delante, los que se atrevan a coger la batuta de esta gran orquesta,
que ahora esta desafinada. Además tendrán que regenerar su propio partido, porque
hasta dentro del mismo partido, saldrán voces críticas que no estarán de
acuerdo, voces del pasado que harían bien de jubilarse y no dejarse ver tanto.
Su tiempo ya paso, y visto así igual yo no tendría que estar opinando. Solo
espero después de esto, que el sentido común prevalezca, y cuando salga a la
calle tener los mismos amigos que hoy. O mejor alguno más. En cualquier caso, y
pase lo que pase.
Hoy es un día histórico.
